Fina Ulloa: “Los testimonios de los pacientes en primera persona crean conciencia y consciencia en la sociedad”

Hablar de Fina Ulloa en Valdeorras es ponerle voz a esta comarca de la provincia de Ourense, donde comenzó su trabajo en la emisora de radio del Grupo Voz a mediados de los ochenta. De allí salió siendo una niña, como tantas otras hijas de emigrantes, y allí regresó para iniciar una trayectoria profesional que la llevó de O Barco a O Ribeiro, de nuevo a O Barco y a Ourense, siempre ligada a este grupo de comunicación gallego. En estos años como redactora en La Voz de Galicia siempre ha estado dispuesta a escuchar para trasladar a la sociedad los testimonios de los pacientes, porque tiene claro que “crean conciencia y consciencia en la sociedad” y sirven para que en momentos difíciles no se sientan solos y conozcan el trabajo de asociaciones como Anasbabi, que ha reconocido con su Premio Referente Comunicación-Prensa 2023 la trayectoria de la periodista valdeorresa.

Fina Ulloa comienza agradeciendo un reconocimiento, “algo siempre agradable e ilusionante”, del que no se cree merecedora. “Simplemente he cumplido con mi obligación profesional como mejor he sabido, que al fin y al cabo es lo que supongo siempre intentamos hacer todos”. Quienes han compartido con ella horas en una redacción saben cómo trabaja. Ahora, igual que el primer día: escuchando a quienes protagonizan las noticias para entender sus historias antes de publicarlas. Esa capacidad de escuchar le permite no fijarse en números, sino en la realidad que hay detrás de las estadísticas y que tanto apreciamos en una asociación como Anasbabi. “La prensa escrita, los medios en general, tenemos un importante papel a la hora de divulgar las necesidades de personas como aquellas personas que viven con las enfermedades raras”, dice. “Si lo hacemos bien -añade- ese papel es fundamental, porque es importante hacer llegar a la sociedad la realidad de la gente más allá de cifras y estadísticas” y mucho más si se trata de colectivos minoritarios “que tienen menos armas, menos fuerza numérica para presionar en demanda de sus derechos”.

En este sentido, ella tiene claro que la prensa tiene que ser ese escaparate, esa ventana hacia la sociedad. “Hay muchas realidades que desconocemos porque, precisamente, son poco habituales o resultan difíciles de percibir”. Pero la redactora de La Voz de Galicia en Ourense cree que ni galas, premios o días en conmemoración de esas enfermedades serán efectivas sin “la generosidad de las familias”. “ Lo que sirve de verdad para dar voz a esas necesidades es que las personas afectadas hagan el sacrificio (yo entiendo que lo es) de dar la cara y contar su experiencia en primera persona”, argumenta. Para Fina “las cifras son cifras; nos bombardean con cientos cada día, de todo tipo; pero un testimonio en primera persona, que alguien te cuente a mi tardaron seis, ocho o diez años en diagnosticarme... o que te explique qué supone su enfermedad en el día a día y qué necesita para vivir dignamente con ella.... eso es lo que llega al ciudadano, lo que nos hace entender qué es una enfermedad y, en este caso, lo que supone tener y vivir con una de esas patologías que ni siquiera parecen tener derecho a que se investigue porque, como son pocos, no compensa el gasto ni la inversión”. Tiene claro que el testimonio de los protagonistas es lo que tiene “un valor infinito, no solo porque crea conciencia y consciencia en la sociedad en general, sino porque puede ayudar a otra gente a la que le pasa lo mismo o algo parecido a no sentirse tan sola y a saber que ahí fuera hay colectivos como Anasbabi que pueden ayudarles o, como mínimo, orientarles”.